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El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Tim Geithner, dijo que su país se está fortaleciendo y Europa ha tomado medidas para reducir de manera significativa el riesgo de una crisis financiera catastrófica.
A pesar de la debilidad del crecimiento europeo, se ven señales alentadoras de recuperación en muchos países emergentes, afirmó el funcionario estadounidense en conferencia de prensa al finalizar la Primera Reunión de Ministros de Finanzas y de Gobernadores de Bancos Centrales del G20.
Sostuvo que la crisis de deuda en Europa no se solucionará con el incremento de cuotas del Fondo Monetario Internacional (FMI) sino con el fortalecimiento del Fondo de Estabilización Europeo.
“Hemos visto el avance en Europa para tener una mayor credibilidad que garantice la estabilidad y hemos visto indicios de los socios del FMI de que están dispuestos a proveer los recursos que se requieren para sostener la situación europea, pero nosotros no vamos a ir al Congreso de Estados Unidos a pedir incrementar nuestra contribución; no pensamos que sea ni necesario ni deseable”, aseveró.
“El principal instrumento que usaremos –dijo- son las líneas que tiene la reserva federal, que se han utilizado ampliamente en las dos diferentes etapas de la crisis y que han tenido efectos muy importantes para amortiguar el impacto para el resto del mundo, de la situación europea”.
Geithner indicó que la discusión de los ministros de Finanzas y de los gobernadores de bancos centrales del G20 este fin de semana en la Ciudad de México se centró en tres cuestiones fundamentales: Europa y el panorama económico mundial, Irán y los mercados de petróleo, y la reforma financiera.
Afirmó que los responsables políticos europeos reconocen la magnitud de los retos del futuro y van a revisar los pasos adicionales en las próximas semanas.
Por su parte, el G20 se comprometió a asegurarse de que el FMI tiene los recursos necesarios para ayudar a sus miembros frente a los riesgos provenientes de Europa, agregó el funcionario estadounidense, quien aseveró que el organismo internacional no puede avanzar sin una mayor claridad sobre los planes europeos.
Destacó la responsable actitud de China en su política monetaria, además de la cooperación efectiva de los socios de Estados Unidos para reducir las importaciones de petróleo iraní y para garantizar que sus bancos eviten operaciones con el Banco Central de Irán y contribuir a que no evada las sanciones.
El secretario del Tesoro aseguró que se trabaja para asegurar la existencia de fuentes alternativas de petróleo de los productores más importantes para ayudar a compensar las reducciones en las exportaciones de Irán.
Este es un año importante para la reforma financiera en Estados Unidos, afirmó Geithner, quien informó que la economía estadounidense ha crecido a una tasa promedio anual de 2.5% en los últimos dos años y medio, debido al crecimiento más fuerte de la inversión privada y las exportaciones.
La productividad ha aumentado y el ahorro privado es sustancialmente mayor de lo que era antes de la crisis, y los déficit fiscales están cayendo, agregó.
El déficit de cuenta corriente de Estados Unidos se ubica en alrededor de 3% del Producto Interno Bruto (PIB), de un máximo de alrededor de 6% antes de la crisis, y el sector financiero es mucho más fuerte, dijo Geithner.
A pesar de este progreso, sin embargo, el daño causado por la crisis aún llevará algún tiempo para reparar, pues la tasa de desempleo sigue siendo muy elevada y el mercado de la vivienda continúa débil.
Las reformas ayudarán a crear una base más sólida para el crecimiento futuro y ampliar las oportunidades económicas. La estrategia es combinar las inversiones y las reformas en la educación, la innovación y la infraestructura con las reformas fiscales y de ahorro para restaurar a largo plazo la sostenibilidad fiscal, puntualizó. (Patricia Pazarán)