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El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, dijo que para afrontar la actual crisis económica es necesario llevar a cabo “acciones necesarias aunque dolorosas”.
Afirmó que para llegar a una solución definitiva y rápida se deben tomar “acciones necesarias aunque dolorosas” y la comunidad internacional debe sumarse a este esfuerzo y apoyar a los países que lo requieran y facilitarles una solución.
Durante la inauguración de los trabajos de Primera Reunión de Ministros de Finanzas y de Gobernadores de Bancos Centrales del G20, Carstens indicó que los programas de ajuste deben implicar reformas estructurales para lograr una recuperación más rápida.
Advirtió que las acciones que se tomen pueden tener un costo alto, pero es preferible realizarlas. También consideró necesario restablecer la confianza y afirmó que los problemas que enfrentan algunos países europeos tienen una solución si se actúa de forma decidida y a tiempo, ya que “nadie quiere que la crisis nos arrastre definitivamente” y hay que tener soluciones que no sean refutadas.
A la par de los ajustes, recomendó implementar programas para mitigar los efectos que causen las medidas para enfrentar la crisis.
El gobernador del banco central mexicano aseveró que los países europeos tienen un problema de credibilidad, lo que conduce a una incertidumbre económica y financiera.
Recomendó a los países deudores tener una relación constructiva con los acreedores, que permita solucionar los problemas e incrementar los flujos de capital y, por tanto, crear una reestructura, la cual ya ha sido relacionada bajo los auspicios del Instituto Internacional de Finanzas.
Carstens sostuvo que para resolver la crisis europea es necesario la estabilización. Además estimó crucial que los países europeos lleven a cabo acciones urgentes para recapitalizar sus instituciones financieras. (Patricia Pazarán)
